05 noviembre 2011

MY MISS AURELIA, una potranca fuera de serie...


LOUISVILLE, Kentucky (De un enviado especial).- De un lote con grandes esperanzas, una figura indiscutible al final del camino. En el Breeders’ Cup Juvenile Fillies (G1-1700 m), My Miss Aurelia no especuló con el desarrollo, al pisar la recta final se atrevió a superar cualquier temor y sostuvo su invicto con un esfuerzo consagratorio, máxime en su segura elección como Campeón Dos Años Hembra de los Estados Unidos.
Catorce anotadas, muchas de ellas con credenciales de augurio dentro del proceso selectivo en la Unión, e incluso tres invictas en tres presentaciones y con trofeo en la máxima categoría en la vitrina. Estas eran, por orden de mandil, Grace Hall (More Than Ready), My Miss Aurelia y Weemissfrankie (Sunriver). Las dos primeras se hicieron presentes con todo su potencial a la cita emblema para las dos años; una muy bien, la otra mucho mejor.
Se esperaba un desarrollo explosivo, y lo hubo. Se esperaba por una resolución clara al pisar el derecho, y la hubo. Y, en consecuencia, debía salir de este choque un elemento de otra dimensión entre los nacimientos femeninos de 2009,y lo hubo. My Miss Aurelia no dejó dudas en este calificado pelotón, incluso cuando después de hacer un gasto prematuro desde el vamos, el cansancio y la carga de Grace Hall le hizo aprobar el examen de la resistencia.
Conducida por Corey Nakatani, la hija de Smart Strike y My Miss Storm Cat (Sea of Secrets), soltó muy presta y del centro hacia los palos ocupó muy pronto un lugar de preferencia, justamente a la patas de Candrea (Trippi), que fiel a su naturaleza cruzó al frente la sentencia por primera vez. Esta enseña se quiso escapar en todo momento de su inmediata perseguidora, pero nada de esto iba a hacer efecto en el resultado final.
La pupila de Steven Asmussen dejó volar las alternativas en parciales de 23s20/100 y 47s19/100, pero se puso seria a partir de ahí. Y tanto fue ese cambio que, con tan sólo empujarla un poquito, la plebiscitada asumió la vanguardia con claridad antes de dejar la última curva. Mientras tanto, Ramón Domínguez hacía crecer a Grace Hall desde el centro del lote, aunque nada de esto tampoco afectaría el peso de la balanza.
La ventaja que la copropiedad entre George Bolton -que bautizó a esta potranca en honor a su madre- y el Stonestreet Stables de los Jacksons sacó antes de volcar en pos del telón jamás fue discutido por la enemiga de los boletos, que por su tesón, cayó con todos los honores. Y si la velocidad de la favorita tuvo pesar en ningún extremo, tampoco el afán de sus pulmones, pues extendió 2 1/2 cuerpos al cabo de 1m46s y la medalla de bronce, en poder de la citada Wemissfrankie, que arribó media docena de cuerpos más tarde.
“Ella es muy especial, en muchas formas. Ya no sólo es su capacidad corredora, sino también el significado que tiene en nuestra operación. Nosotros criamos caballos para ganar y no únicamente para vender. Este fue un año muy duro para nosotros, nos merecíamos este premio tan grande”, expresó Bárbara Banke, del Stonestreet Stables, que perteneció a Jess Jackson, que falleció esta temporada.
Heroína en la anterior del Frizette Stakes (G1), en Saratoga, My Miss Aurelia tiene bien ganados los elogios y el galardón en el próximo Eclipse Award. En cuanto al horizonte, está visto que repertorio le sobra, una cuestión que en el contexto de la etapa como tres añera hace entusiasmar a más de un desvelo.

Sebastián Heredia