El primero es el clásico Agraciada G-3 sobre 1800 metros, con tan sólo cinco yeguas en gateras.
Es un reservado para ellas en peso por edad.
Sin demasiadas sorpresas, en una prueba que parece accesible para las fuerzas de Rosa Colonial, al actual mejor yegua de nuestro medio, se medirá con rivales, que ya ha enfrenado y superado, y con otras que van en pos de una buena actuación, y con vistas a destronar a la mejor pero con sus chances mínimas.
A la hora 15:57 y en segundo termino de la reunión se dará la largada..
Rosa Colonial, viene de vencerlas a algunas de ellas en las dos últimas prueba disputadas para yeguas, ambas sobre dos mil metros y una de ella el 6 de enero en la prueba más importante del año para las femeninas.
Es muy superior, y no hay demasiadas que en lo previo la puedan vencer, sus chances primarias son elocuentes es por eso que busca una nueva victoria clásica, para sí extender aún más el liderazgo entre las de ella.
Todo indica que la de La Pomme será la vencedora, pero las carreras se corren en la cancha. Favorita
Luckily, recuperó algo de su imagen que estaba opaca y perdida en el tiempo la del Intuición.
Viene de escolar muy cerca a la favorita, corriendo una muy guapa carrera, y escapando en solitarias estas dos de las restantes. El la principal carta que la favorita va a tener que enfrentar, pero sin dudas que su nivel no lo viene recuperando, no está en su techo.
Es más que una Enemiga y le puede plantear lucha a la favorita.
Cosa Fitz, ahora no se las verá fácil ya que carga mucho peso en su lomo, ella en los peso por edad no el favorecen, pero es lo que tiene en la cartilla, es por eso que anotó.
Es inferior a las dos antes mencionadas, pero en un lote muy reducido en cuanto a nivel, seguramente esté entre las de más arriba.
Va a tener que mostrar su mejor cara si quiere ser protagonista entre ellas.. Sorpresa.
Las demás son las de más bajo rango, Dear Grace con un valioso 3º puesto ante Mama Quilla la semana pasada y Brazzaville que es inferior desde todo punto de vista y además los kilos no la ayudan.
Jonathan Indaburu Maroñas
